Una ciudad con el sello de dos genios: Roma

Hace algunos posts les hablaba de la fascinación que me produjo la exposición de Bernini en el Paul J. Getty Museum y les recomendé un libro: The Genius in Design. Bernini, Borromini and the Rivalry that Transformed Rome de Jake Morrissey. Quiero compartir con ustedes algunas impresiones del libro. Realmente vale la pena. 

La idea central del autor me parece genial: el paisaje arquitectónico y emblemático de Roma le debe su razón de ser a dos grandes artistas del siglo XVII, Gian Lorenzo Bernini y Francesco Borromini. En la historia del arte, el reconocimiento de Bernini ha sido mayor y Borromini ha quedado relegado posiblemente al universo de los especialistas y amantes de este tema. Las causas de este "olvido" se encuentran tanto en las personalidades de cada uno como en su manera de convivir con los poderosos de su tiempo. Morrissey lo explica de una forma clara, sin asumir posiciones ni preferencias, tan sólo dando cuenta de los hechos y delineando la psicología de los artistas. Las obras y manera de traducir su talento en el espacio reflejan sus esencias: Bernini, el hombre de lo espectacular y majestuoso; Borromini, el hombre de la lógica y la precisión. Ambos geniales.  

He aquí algunas de las obras que caracterizan a esta ciudad museo: 

Iglesia de Santa Inés. Borromini.

Fuente de los Cuatro Ríos. Bernini. 

La historia que narra Morrissey es la de la rivalidad entre estos dos grandes artistas del barroco italiano y el telón de fondo de su desarrollo y vida es la narrativa política de Roma, con el ascenso y alternancia al poder en el Vaticano de diversos papas, así como de la red de intereses que se tejieron en torno a ellos. Su historia y altibajos transcurren a lo largo de 10 pontificados: de Clemente VIII a Inocencio XI. 

Existen hechos en la historia de la humanidad que se repiten permanentemente, tal vez cambien las caras, los métodos y los recursos, pero la naturaleza humana demuestra permanentemente sus pasiones y luchas internas. El poder siempre se ha revestido con un halo de arte y diversos artistas han sido apoyados por patronos y mecenas que han promovido sus obras. El hombre busca trascender, hacerse inmortal ya sea a través de obras propias o del apoyo a otras personas que les puedan hacer "permanentes e infinitos" a través de la escultura, la arquitectura, la pintura o la palabra.  En este caso, los nombres de Alejandro VII, Urbano VIII, Inocencio X, Pamphili, Barberini -entre otros- gravitan como los grandes patrocinadores de obras majestuosas de esta ciudad única y como actores en la corte papal. 

Poder, dinero, arte, majestuosidad, hechos, ideas que han rodeado la vida en el Vaticano y en San Pedro. La silla de San Pedro da cuenta de la terrenalidad del hombre, no sólo de su "espíritu". 

Recomiendo ampliamente esta lectura. Además del recuento de sucesos y el detalle con que se conocen los entretelones del poder, el autor nos lleva de manera natural por el mundo del arte, sus precisiones y estructura. Excelente mezcla de poder, conocimiento del arte e historia. 

Concluyo el post con imágenes que reflejan el estilo y talento de estos dos grandes maestros del arte del Siglo XVII. 

San Carlino. Borromini.

El rapto de Proserpina. Detalle. Bernini.

El domo de San Carlino. Borromini.

Baldachinno en la Catedral de San Pedro. Bernini.

Saint Ivo a la Sapienza. Borromini.

Columnata de la Plaza de San Pedro. Bernini