Sobre el arte de simplemente estar
Hoy en la mañana tuve un encuentro muy grato a partir del cual redescubrí el valor de simplemente estar.
Estuve con una amiga a la que hacía muchos años no veía y al encontrarnos nos conectamos en una conversación que en otros tiempos hubiera sido impensable. Estoy leyendo el Libro Tibetano de la Vida y de la Muerte, y fue lo primero que vio al llegar a la mesa. Me preguntó si iba a algún lugar a meditar y mi respuesta fue que no, que simplemente llevo algunos años por razones diversas, buscando respuestas y la manera de estar en paz con temas que fueron tabú en mi vida, tales como la muerte.
La conversación nos llevó por los caminos de la espiritualidad y de lo que hemos hecho en los últimos años. Entre otras cosas, estoy terminando mi certificación como Coach para dar coaching de vida a personas que estén en procesos de transición y a mujeres que estén en la política. Mi propuesta es ayudar a las personas a sentirse mejor consigo mismas, a vivir vidas más integrales y en la medida en que sean mejores, tomarán mejores decisiones en sus trabajos y los beneficiados seremos los ciudadanos que dependemos de sus decisiones. Ella, por otro lado, me contó que lleva un buen rato en un proceso de coaching que ha disfrutado muchísimo y que la tiene muy contenta en muchas áreas de su vida.
Nos reímos mucho al comentar la evolución que han tenido nuestras respectivas bibliotecas, de leer temas de política, filosofía y no sé que tantas otras cosas "importantes y trascendentes" estamos en los libros de desarrollo humano y espiritualidad. Hace años no nos hubiéramos imaginado teniendo la conversación que tuvimos y menos comentando todo lo que comentamos.
Se me pasó de volada el encuentro y lo disfruté inmensamente. Me reí mucho al imaginar que posiblemente uno se la pasa en la vida estudiando, aprendiendo y haciendo exámenes para darse cuenta de que en realidad lo único que vale la pena -y no hay estudios para ello- es aprender a simplemente estar y disfrutar ser.
Comentarios
No dejan de llamarme la atención estos temas. Particularmente me refiero al hecho de tu reencuentro con tu amiga, las vueltas que da la vida nunca dejan de sorprenderme y gracias a algo similar he aprendido un poco más (espero) a tener paciencia. Sobre el arte de estar alguna vez usé esta frase en una entrada propia: Algún día tal vez tengamos que compartir soledades, enfermedades y despedidas y espero llegado el momento, estar.
Gracias Clau!
Son temas que a mi también me gusta y cuyo valor voy redescubriendo con los años. Finalmente, lo "básico y esencial" es lo qué más nos impacta. Nada como poder compartir con alguien el simplemente, estar.
Saludos y gracias a ti Carlos!
Es necesario tener conciencia que en la vida muchas veces, hacemos lo más urgente y soslayamos lo importante, cuando la formula es justamente lo contrario.
Cuando aprendamos que hemos vivido en el error, entonces, sabremos simplemente estar y disfrutaremos ser!
Saludos.
Amorosamentetuyo
Vivimos el siglo del absurdo: lo urgente pocas veces es importante...y es a lo que le damos prioridad. ¿Habíase visto mayor contradicción?
Saludos,