Censura y muerte en la blogósfera

La fortuna de decir lo que se piensa y la libertad de expresión empiezan a dejar de ser un bien común en la blogósfera. Omid Reza Mir-Sayafi, colega bloguero, fue condenado y encarcelado en la cárcel de Evin por haber insultado al líder supremo y fundador de la República Islámica de Irán. 

Las autoridades señalan que se trató de un suicidio (¡cuántos suicidios se dan en todos los países, sobre todo sin testigos y siendo los suicidas personas que causaban disgusto al régimen en cuestión!). Familiares, organizaciones diversas y Reporteros sin Fronteras indican que existen irregularidades en el hecho; por ello están pidiendo la creación de una comisión independiente que explique lo acontecido. 

Otros internautas se encuentran encarcelados en el país, entre ellos, el "padre" de los blogueros iraníes: Hossein Derakhshan. ¿Qué es de ellos? Poco se sabe. 

Claramente, una de la bendiciones del internet en general y de la blogósfera en particular, es la libertad con que los blogueros podemos escribir. La libertad de expresión es un derecho de hombres y mujeres en el mundo real y por ende en el mundo virtual. Me parece absolutamente reprobable que la libertad se coarte a nombre del Estado y de Dios y que la vida de un ser humano se vea amenazada por manifestarse a través de la palabra. 

Pienso que quienes participamos en este espacio y tenemos voz debemos usarla a favor de quienes no pueden hacerlo con libertad. Existen casos increíbles, como el de Yoani Sánchez, quien ha logrado ser reconocida en el mundo y gracias a ello no ha sido silenciada en Cuba. Nuestros colegas iraníes no han corrido con la misma suerte. No nos callemos y expresemos nuestra posición al respecto, sobre todo, si podemos hacer uso de nuestra palabra sin temor a aparecer en los noticieros como "un caso más de suicidio en la cárcel". 

Aquí la nota sobre Omir Reza Mid-Sayafi. 

Imagenes: El Pais y resistensanleo.blogspot.com