¡Cuidado con los ingenieros!
Gran curiosidad me despertó una nota que apareció en la revista The Atlantic de los meses de enero/febrero de este año. Su título es "Terrorism. Engineers for Osama" (Terrorimo: Ingenieros a favor de Osama).
Lo que dice el texto es para tomar en cuenta. Basado en un ensayo elaborado por dos investigadores del Departamento de Sociología de la Universidad de Oxford destacan que el estereotipo de los terroristas islámicos que han apoyado al Jihad es muy distinto al que usualmente se piensa.
¿Ustedes qué imagen se han hecho de ellos? Yo los pienso como personas de poca educación y fáciles de manipular. Pues el estudio dice otra cosa. Basado en información sustentada en datos de 404 militantes de 31 países se encontró que 178 de ellos tenían una clara preferencia por la ingeniería. De éstos, 78 habían obtenido el grado en la materia a diferencia de otros (60) que habían optado en su conjunto por estudios islámicos, medicina, economía o administración de empresas.
Los autores no encontraron evidencia de que los grupos radicales buscasen ingenieros expresamente. Sus conclusiones indican que existe algo en su estructura mental que encaja con la idea islámica de una sociedad perfecta. Por ejemplo, el énfasis en la estructura, las reglas y en la búsqueda de soluciones únicas a problemas complejos y multifactoriales. Para darle mayor fuerza a su argumento, los investigadores agregan información concerniente a ingenieros en el Medio Oriente, en Estados Unidos y en Canadá que indica que tienden a ser, comparados con otros profesionistas, más religiosos y conservadores ideológicamente, así como más abiertos y receptivos a posiciones y mensajes radicales.
En todo caso, el hecho me plantea una serie de preguntas y sugerencias. En primer lugar habría que advertirle a las muchachas en edad casadera que tomen sus precauciones si deciden contraer matrimonio con un ingeniero. Sería conveniente tomar un curso de negociación antes de embarcarse en una aventura así. Para lograr que el susodicho colabore en la casa habría que invitarlo a desarrollar un sistema de mantenimiento, administración y cuidado del hogar en el que él mismo pudiese establecer sus funciones y roles (claro, siempre "guiado" por su querida futura esposa).
Otro terreno en donde esta información es de inmensa valía es el laboral. Importantísimo: en una mesa de trabajo hay que conocer a los interlocutores y su curriculum. Si se trata de ingenieros sería muy útil presentar problemas complejos en una matriz procedimental y ayudarlos a decidir a nuestro favor mediante la táctica de hacer énfasis en las estructuras y las reglas.
PS. Si alguien tiene interés, en el link de la nota se puede descargar el ensayo de los sociólogos de Oxford.
Comentarios
los ingenieros... toda una raza distinta vdd?
...jejeje, ahora sha voy para alla,a experimentar una carrera de ingenieria q me dara mushos desvelos... pero, todo por ser mejor cada dia!
grax por tu comentario, me agrada que gente de otros rumbos me visiten...
y bienvenida a la blogosfera!
saludos!
Besos
Me encuentro entre la definición de esta "raza" y las "vendettas", riéndome, por supuesto.
R: el artículo no habla de ninguna ingeniería en particular, supongo que aplica a todas: la mecánica, la industrial, la civil, la aeronáutica, la química, la informática y todas las que vengan en camino. En todo caso...., la conclusión será la misma!!!!
Pete: disfruta los desvelos de tu nueva aventura. Gracias por la bienvenida y nos vemos en el camino de la blogósfera. Gracias por visitar.
Saludos!!!
.... si, es mera coincidencia, jajajajaja.
En mi opinión, no es más que la educación que se le dio a esa persona lo que la hace propensa a ser religiosa, fundamentalista, con ideas violentas, etc. Y claro, no falta el caso de la persona clínicamente demente. No pienso que sea por su personalidad y su método predilecto de pensar (como ingeniero). Y eso me lleva a otro punto, la gente estereotipa siempre, encasilla a la gente según su profesión, con “x” características. Y lo peor de todo es que mucha gente no se pone a reparar en esto y acepta cómo la sociedad lo encasilla. Para mi, un ingeniero tiene que ser “ingenioso” y eso lleva a “creativo” y de ahí el paso a las artes es muy corto ¿no? da Vinci es un ejemplo de alguien que abarcó el arte y la ciencia perfectamente.
Bienvenido por estos rumbos y gracias por dejar tu comentario. La nota del Atlantic me pareció simpática por la manera en la que hilan las ideas y llegan a la conclusión que menciono, aunque se cuidan de señalar que los resultados son contundentes. En todo caso, si, así es como se construye a un "enemigo", llenándolo de adjetivos, prejuicios movilizados y características fácilmente vendibles.
Si creo, por otro lado, que a ciertas profesiones corresponden ciertos tipos de personalidad. Hago énfasis en que no se trata de características positivas o negativas, simplemente de elementos distintivos de su manera de ser: un abogado y un bailarín tienen maneras particulares de entender, explicar y caminar por la vida, al igual que un ingeniero y un pintor, una internacionalista y un diseñador. Cierto es que también hay prejuicios respecto a ciertas profesiones, pero también existen comunes denominadores, y excepciones a toda regla.
Me gusta tu ejemplo de Da Vinci, pero justamente por ello me parece que el hombre fue excepcional en todos los sentidos y nos vendría muy bien en estos tiempos rescatar el espíritu renacentista.
Saludos y gracias por visitar.
Solo quiero explicar lo que pienso acerca de la personalidad y las profesiones. Creo que cualquier personalidad puede entrar bien en cualquier actividad o profesión y no hay una que le venga mejor que otra. Tal vez tengamos diferentes conceptos de lo que es "pesonalidad". Para mi es: "cómo es una persona, es carismática, nerviosa, bromista, etc., incluso independientemente de su método o manera de pensar". Así te puedes encontrar un científico, un músico o un administrador extrovertido o introvertido, juguetón o serio.
Tienes razón, en eso me pareces muy Jungiano, existen modos extrovertidos e introvertidos para caracterologías similares. Coincido en que no podemos "casar" personalidades con profesiones específicas. Simplemente insistiría en que existen rasgos de la personalidad que pueden ser más proclives a ciertas actividades. (Como una persona a quien le gustan las actividades al aire libre. Tal vez pudiese ser un gran oficinista, pero seguramente será un mejor arqueólogo o aficionado de los deportes extremos.)
Gracias por tus comentarios y me gustó mucho tu blog.