Desde el principio de los tiempos
Así fue, desde el principio de los tiempos te empecé a extrañar. Desde el principio de los tiempos empecé a sentir tu ausencia. No entendía la razón de ser de aquella extraña sensación convertida en realidad: nos amábamos, habíamos decidido empezar nuestra era, nuestro tiempo, nuestro mundo un día en que el vuelo cotidiano de los aviones y las aves sobrevolaba nuestros cuerpos y nuestras ilusiones. Ese día el futuro se empezó a poblar de fantasías, acaso de quimeras, de ganas y de tiempo. A partir de ese momento la incertidumbre del futuro se convirtió en una esperanza que abrigar, en un designio que cumplir, en un destino que alcanzar.
Desde el principio de los tiempos te empecé a extrañar. Cuando el azar se transformó en presente, en días y noches, en horas y minutos de caricias posibles y anheladas, de magia extinta, de palabras muertas comprendí que la distancia estaba anidando en nuestras vidas.
Quise ignorar el primer síntoma de aquel fantasma que amenazaba con quedarse a vivir entre nosotros: el día que traté de descubrir mi reflejo en tu mirada y no me encontré. Ese día supe que la ausencia, que tu ausencia me estaba haciendo invisible.
Desde el principio de los tiempos te empecé a extrañar. Lo primero que sentí fue nostalgia por lo que aún no llegaba; al paso de las rutinas descubrí que sentía añoranza por los sueños cuando aún eran posibilidad y cuando en ellos cabían todas nuestras ganas.
Hoy descubrí que siempre te he extrañado, que irremediablemente me han acompañado tu distancia y tu lejanía y que lo único que he podido sentir ha sido el peso de tu ausencia…. aunque digas estar a mi lado.
Comentarios
Otro abrazo lleno de cariño y comprensión para ti.
Bienvenida a este lugar en donde no te queda otra más que cargar contigo y con el abandono de los demás.
No existe el amor.
Hasta pronto.
Hoy podría decir que el amor si existe, por ello cuando está ausente su no presencia se siente tanto.
Gracias por tu compañía en momentos de tristeza y espero encontrarte de regreso por aquí.
Lo que si sé es que esa sensación de incompletitud, cuando hace acto de presencia, es abrumadora.
Un beso y gracias por visitar.
Un beso solidario y de regreso
Qué bueno tenerte de regreso. Gracias por tus palabras.
Un beso,
LaClau